domingo, noviembre 05, 2006

érase una vez...

Hace muchos años, tantos que no se pueden contar con mis dedos y los tuyos juntos existió en el mundo un hada, tenía las alas de cristal y la sonrisa de niño, era etérea, estaba hecha de pura fantasía, le gustaba mojarse en las gotas de lluvia y recorrer el mundo en un día, le gustaba enamorarse de la luna llena y le gustaba el ruido de las hojas que vuelan.
Conoció a un humano uno de esos días en que andaba brincoteando siendo felicidad y melancolía. Se enamoró del humano... pero los humanos y las hadas no pueden ni deben estar juntos, tienen mundos separados.
Sin embargo, un día en que el humano abrió bien los ojos pudo verla, y fue tan rápida la sorpresa que quiso tocarla con los dedos, saber si no era una fantasía, quiso saber si la luz no provenía de un sueño provocado por el sol del día y una mala cena.
El humano era de carne y hueso, tenía esas dificultades que tienen todos los seres humanos para creer en la fantasía. Algo de especial tenía este humano, tenía los ojos tristes pero se reía con inocencia, tenía la voz grave y los dedos delgados y llenos de vida, tenía el cabello como la noche y es tan especial que no es posible olvidarlo y es tan especial que cerrando los ojos se puede recordar el aroma que despedía.
El hada era real... y el no pudo evitar sumergirse en ella. Absurdas las decisiones que tomaron ambos por creer que los momentos que vivieron esos días en que se encontraban a escondidas los acercarían.
Cuando dos seres tan iguales y tan diferentes se encuentran, el peligro corre en el aire, la irrealidad se respira, las pieles se sensibilizan y son momentos que se quieren sacar de la mente pero que a veces simplemente no se puede. Valían la pena los encuentros de lo etéreo y de la carne, valían la pena las chispas, las risas y cada uno de los besos que se arrancan de lo prohibido y se tatúan en la piel de los otros, valía la pena no poder verse de día (porque esta hada y este humano solo se veían de noche), valieron todos y cada uno de los minutos que se arrancaban de los relojes de arena.
Un día eso se acabaría... llegó muy temprano y muy tarde ese día. Y no es posible que lo único que se tengan sean los recuerdos de la noche tibia, y no es posible que el minutero deje de caminar en su contra.
El humano atravesó el mar, el hada se quedó viviendo la vida de siempre, y todo volvería a la normalidad que pesa tanto algunos días.
Les queda el recuerdo a los dos de las horas que se roban, les queda un cambio de año y muchas frases sin sentido, muchos “quisiera no quererte tanto”, algunas heridas que sanaran con el tiempo, y muchas sonrisas. Valió la pena la noche y el miedo

5 comentarios:

Depiesyalas dijo...

Uf! precisamente en estos momentos su post me caló bien hondo...
La verdad ya no sé si vale la pena cruzar la línea del miedo, el alma está adolorida; las hadas así como las aves y los peces, seres frágiles se quiebran entre los dedos de los humanos.
Entonces... el cardumen crea movimientos para salvar su existencia, siempre, claro, disfrutando de ellos.

Anónimo dijo...

"You'll Never Find Another Love"

You'll never find, as long as you live
Someone who loves you tender like I do
You'll never find, no matter where you search
Someone who cares about you the way I do

Whoa, I'm not braggin' on myself, baby
But I'm the one who loves you
And there's no one else! No one else!

You'll never find, it'll take the end of all time
Someone to understand you like I do
You'll never find the rhythm, the rhyme
All the magic we shared, just us two

Whoa, I'm not tryin' to make you stay, baby
But I know some how, some day, some way
You are (you're gonna miss my lovin')
You're gonna miss my lovin' (you're gonna miss my lovin')
You're gonna miss my lovin' (you're gonna miss my lovin')
You're gonna miss, you're gonna miss my lo-o-ove

Late in the midnight hour, baby (you're gonna miss my lovin')
When it's cold outside (you're gonna miss my lovin')
You're gonna miss, you're gonna miss my lo-o-ove

You'll never find another love like mine
Someone who needs you like I do
You'll never see what you've found in me
You'll keep searching and searching your whole life through

Whoa, I don't wish you no bad luck, baby
But there's no ifs and buts or maybes

(You're gonna) You're gonna miss (miss my lovin')
You're gonna miss my lovin' (you're gonna miss my lovin')
I know you're gonna my lovin' (you're gonna miss my lovin')
You're gonna miss, you're gonna miss my lo-o-ove

Whoa, oh, oh, oh, oh (you're gonna miss my lovin')
Late in the midnight hour, baby (you're gonna miss my lovin')
When it gets real cold outside (you're gonna miss my lovin')
I know, I know that you are gonna miss my lo-o-ove

Let me tell you that you're gonna miss my lovin'
Yes you will, baby (you're gonna miss my lovin')
When I'm long gone

I know, I know, I know that you are gonna miss


**aMO a mICHEL bUBLE**

Anónimo dijo...

...te demandaría por "plagio",jajajajajajajja,...porque esta historia es de otra autora,de quien no recuerdo ahora mismo el nombre,y que,por cierto,le puso un final muchísimo más bello y real.Con cariño.

Lilith dijo...

Pues que raro... al menos ESTA historia es mia, de mi puño y letra y fue en algún momento en realidad una carta a alguien... tal vez se parezca a otra, pero ciertamente no es la misma, es simplemente una experiencia personal llevada a historia... tu sabrás... así que para mí el final no puede ser mas bello porque simplemete es REAL.

Anónimo dijo...

A veces vale la pena; a veces...