Cuanto daño puede hacer un te quiero, cuanto derrumbe interno... la canción de fondo mientras escribo esto: "Breathe easy"... la canción de fondo el sábado: ninguna. Mirones: 1, interrupciones: miles, sentimientos: los más encontrados de este mundo.
Pasaron 4 días de un fin de semana muy largo, ya son las 2:25 de la tarde del martes... el fin de semana acabó el lunes, mi equilibrio en la vida acabó el sábado, mis ganas de besarte no han parado desde entonces...
Nos besamos, nos besamos tanto, como la última vez, como la vez que te fuiste... otra vez te fuiste el sábado, al menos ahora antes de huir de mi dijiste lo que sientes, por primera vez en mucho tiempo aceptaste que me quieres... "Demasiado", que te duele quererme tanto... ¿tanto?... si me quisieras tanto no te importarían muchas cosas, demasiado en juego, demasiado en juego. Quería que me dijeras algo el sábado, el lunes, hoy ya es martes, dime algo, lo que sea, causa una reacción en mi mente, por lo que más quieras, dime algo de nuevo, no me dejes deseando besarte de nuevo, carajo!... no puedo dejar de pensar en tus besos...
Baje a hacerme de comer... y creo que después de todo esto ya es lo suficientemente deprimente como para apartarme también de mis papas criollas... no me quites todo... ya me quitaste demasiado.
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